Supongamos que se publica una información, y alguien pretende censurarla. Desde el momento en que la sociedad sea consciente de ese intento de censura, se producirá un intento de acceder a esa información y de difundirla que será proporcional a la fuerza con la que se intenta censurar.Un corolario de esta ley es que no hay nada más útil para difundir una información que intentar censurarla. Esto lo saben bien los directores de cine que intentan que se hable de su película a base de mostrar algún desnudo de alguna actriz o incluir escenas más o menos calientes que se sepa que van a estar en el filo de lo censurable en su país.
Un ejemplo maravilloso de esta ley es el del código de descifrado de los HD-DVD, que cierto hacker ha conseguido obtener hace poco. El código se publicó en medios como Digg, lo censuraron, se volvió a publicar, y la lucha ha desembocado en una locura por difundirlo, hasta el punto que se han registrado dominios cuyo nombre es el propio código, o se ha difundido mediante textos que no lo nombran explícitamente pero que permiten obtenerlo, como una canción en la que la letra es el número mismo, o secuencias de preguntas cuyas respuestas son cada uno de los pares hexadecimales del número. Las entradas en webs como digg o meneame que hacen difusión del ya famoso código son innumerables. A estas alturas yo creo que los que intentaban censurar esta información ya deben haber aceptado la cruda realidad: no pueden enfrentarse a la sociedad de la información, da igual los medios, las influencias o el dinero que tengan. Sencillamente, la gente, cuando quiere, es más poderosa que cualquier organización.
1 comentario:
Y los que pretendían censurar ciertos temas en los blogs?
Está claro que a menos que estemos en China, donde prácticamente todo Internet está censurado es imposible poner barreras a la Red de redes y a todos sus contenidos o si no se comprueba aqui:
http://www.greatfirewallofchina.org/test/
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