Los aficionados a temas históricos y militares no podemos llegar a estas fechas sin acordarnos de la famosa tregua de Navidad, que se produjo en algunos puntos del frente occidental de la Primera Guerra Mundial, durante la Navidad de 1914.
Se ha hablado bastante del tema, y hay abundante información al respecto, pero nunca está de más recordarlo. En la Nochebuena de 1914, muchos soldados de uno y otro bando comenzaron a celebrar la fiesta con villancicos de su país, especialmente los alemanes con su conocido Stille Nacht (en España conocido como "Noche de Paz"). Al escucharse unos a otros surgió en seguida la sensación de que valía la pena disfrutar aquel momento en paz y concordia, y desde las trincheras se lanzaban felicitaciones o pedían tal o cual villancico. Al surgir la confianza, algunos se atrevieron a acercarse para ofrecer cigarrillos, bebida o algún otro pequeño detalle. Pronto el intercambio de regalos y las conversaciones hicieron que surgiera un clima de concordia, e incluso se llegó a realizar una misa conjunta, y se cuenta que incluso un partido de fútbol, que ganaron los alemanes.
Cuando los altos mandos de uno y otro bando se enteraron, montaron en cólera y dispersaron a las unidades implicadas, castigaron a los responsables y ordenaron que en sucesivas navidades se realizasen bombardeos sistemáticos para prevenir hechos similares.
Pese a la tozudez de los generales, este episodio es siempre recordado como un buen ejemplo de lo alejadas que están las guerras de los hombres de a pie, quienes, ajenos a los intereses y pasiones de los políticos, preferirían vivir en paz y armonía si se lo permitiesen.
Hay una película francesa que intenta reflejar este suceso. Se trata de Feliz Navidad (Joyeux Noël). Creo que es bastante buena y bastante fiel a los hechos, aunque tampoco se ajusta a ellos al 100%, y se toma algunas libertades como la historia de la pareja de cantante. Las interpretaciones tampoco son excepcionales, excepto la del cura escocés y algunos personajes secundarios. Pero lo importante es que transmite bastante bien el espíritu de la tregua, y el contraste entre el odio que los poderosos (gobierno, iglesia, alto mando militar) intentan inculcar a los ciudadanos de un país hacia los del otro, y la naturalidad y concordia en la que éstos viven cuando comprenden que hay más cosas que los unen que cosas que los separen.
Por cierto, que en la versión original, la película respeta totalmente el realismo de los idiomas. Los franceses hablan en francés, los alemanes en alemán, y los escoceses en inglés. Todos juntos hablan en inglés (lo cual parece lógico) y entre franceses y alemanes a veces hablan en francés. Quien domine las tres lenguas tendrá la oportunidad de disfrutar de la situación en todo su realismo.
Imagen: http://www.waltvoice.com/joyeux-noel/
Se ha hablado bastante del tema, y hay abundante información al respecto, pero nunca está de más recordarlo. En la Nochebuena de 1914, muchos soldados de uno y otro bando comenzaron a celebrar la fiesta con villancicos de su país, especialmente los alemanes con su conocido Stille Nacht (en España conocido como "Noche de Paz"). Al escucharse unos a otros surgió en seguida la sensación de que valía la pena disfrutar aquel momento en paz y concordia, y desde las trincheras se lanzaban felicitaciones o pedían tal o cual villancico. Al surgir la confianza, algunos se atrevieron a acercarse para ofrecer cigarrillos, bebida o algún otro pequeño detalle. Pronto el intercambio de regalos y las conversaciones hicieron que surgiera un clima de concordia, e incluso se llegó a realizar una misa conjunta, y se cuenta que incluso un partido de fútbol, que ganaron los alemanes.
Cuando los altos mandos de uno y otro bando se enteraron, montaron en cólera y dispersaron a las unidades implicadas, castigaron a los responsables y ordenaron que en sucesivas navidades se realizasen bombardeos sistemáticos para prevenir hechos similares.
Pese a la tozudez de los generales, este episodio es siempre recordado como un buen ejemplo de lo alejadas que están las guerras de los hombres de a pie, quienes, ajenos a los intereses y pasiones de los políticos, preferirían vivir en paz y armonía si se lo permitiesen.
Hay una película francesa que intenta reflejar este suceso. Se trata de Feliz Navidad (Joyeux Noël). Creo que es bastante buena y bastante fiel a los hechos, aunque tampoco se ajusta a ellos al 100%, y se toma algunas libertades como la historia de la pareja de cantante. Las interpretaciones tampoco son excepcionales, excepto la del cura escocés y algunos personajes secundarios. Pero lo importante es que transmite bastante bien el espíritu de la tregua, y el contraste entre el odio que los poderosos (gobierno, iglesia, alto mando militar) intentan inculcar a los ciudadanos de un país hacia los del otro, y la naturalidad y concordia en la que éstos viven cuando comprenden que hay más cosas que los unen que cosas que los separen.
Por cierto, que en la versión original, la película respeta totalmente el realismo de los idiomas. Los franceses hablan en francés, los alemanes en alemán, y los escoceses en inglés. Todos juntos hablan en inglés (lo cual parece lógico) y entre franceses y alemanes a veces hablan en francés. Quien domine las tres lenguas tendrá la oportunidad de disfrutar de la situación en todo su realismo.
Imagen: http://www.waltvoice.com/joyeux-noel/
1 comentario:
hola bloguero,
ante todo gracias por añadir mi blog a tu lista de blogs y por tu comentario del otro día. me alegro de que mi blog bilingüe te ayude con el estudio del idioma alemán.
referente a la película, tienes toda la razón, es muy bonita y un buen ejemplo de cómo podrían ser algunas cosas.
un saldudo
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