martes, 12 de junio de 2007

Ya lo decía Rousseau

Tener lejos a las personas a las que queremos es una situación desagradable y agobiante, pero en parte también una inyección de magia y de interés. Al igual que el aire que respiramos, las personas amadas se hacen más importantes cuanto más nos faltan, mientras que cuando las tenemos a nuestro alcance, a veces se mimetizan con nuestro entorno y pasan desapercibidas.

La antigua costumbre de escribirse cartas, llenaba de encanto y dulzura los amargos momentos de separación, no sólo entre los amantes, sino entre amigos y familiares. Ahora es tan fácil encender el móvil... y con los de nueva generación, hasta tendremos que soportar que nos vean nuestra mala cara de ir a trabajar. Tenemos demasiada facilidad para estar al lado de los demás. Incluso esa facilidad se vuelve contra nosotros, porque si pasa un cierto tiempo sin que llamemos a esa persona (o, para ser más modernos aún, sin hablar con ella por mensajería instantánea), parece como que pasemos de ella. Como nos sería fácil hacerlo, si no lo hacemos será que no nos interesa, cuando no tiene por qué ser así. La vida moderna nos agobia cada día, y por lo general no podemos estar por todo el mundo. Quienes no comparten nuestra vida cotidiana más inmediata, forzosamente acabarán siendo personas con las que charlemos o nos escribamos una vez cada tantos meses.

"Pues qué mal", dirán algunos. A eso yo respondo: ¿Y el encanto de volver a conversar con esa persona? ¿Y el interés renovado que surge del tiempo transcurrido, tras el cual aparecen nuevos e interesantes temas de conversación? Decía Rousseau que la paciencia es amarga, pero sus frutos son dulces. Lo mismo puede decirse a menudo de la separación, mientras en ella siga latiendo el afecto.

5 comentarios:

Sonia dijo...

Está claro que vivir lejos de la persona amada es algo duro y complicado, pero hoy día gracias a las tecnologías podemos sentirnos "un poquito más cerca".

Aún así, lo mejor de las separaciones y las distancias son los reencuentros.
Todo se valora más.

Besitos lejanos.

Anónimo dijo...

La vida és així. Res dura per sempre i es inútil arrossegar-se per aconseguir allò que vols. Gràcies pel petit comentari. Serveix molt. Ara mateix t'agrego al blogroll!

Merci


Law

Anónimo dijo...

Todas relaciones tienen su encanto así como su parte negativa. Algunas la distancia, algunas el agobio... también depende de la personalidad de cada persona, supongo.

Sea como sea, me encanta ver que lo llevas tan felizmente : P

Hace mucho que no sé de ti (ya, ya sé que es mi culpa porque no entro en el foro ni salgo xD), a ver si este verano hacemos quedaditas varias, no?

Te agrego majo :*

Peluche de Felpa dijo...

la musica de campo es esto:



Dvda - what would brian boitano do

guttermouth - I'm destroying the world.

Música piratesca y de campo cañera rockera ;D es lo mejor del mundooooooooooooooooo

Johnny Tastavins dijo...

Dicen que el roce hace el cariño, y que la gente junta es la que riñe. No lo dudes, el contacto es importante. Y la relación a distancia, aunque posible, deviene fracaso si no hay momentos de encuentro real.

Interesante post en un momento en el que meditaba al respecto. Un saludo.