La ley, esa enemiga

Es la noticia de moda en la blogosfera: el caso Ramoncín vs. alasbarricadas.org. Son numerosas las páginas que la comentan, generalmente indignadas por la decisión judicial. Realmente el caso es importante, porque sirve de precedente para futuras actuaciones similares. Pero antes de hablar de este caso en concreto, dejadme que os cuente otra cosa.

Esta mañana, al llegar a la oficina, un compañero de trabajo nos ha explicado que ha tenido que cerrar un foro que administraba (creo que el foro estaba dedicado a Bruce Springsteen). ¿Por qué razón? Resulta que ayer se encontró con un mensaje en un hilo, que le amenazaba con denunciarle si no expulsaba al usuario X en menos de 48 horas. Por lo visto, los denunciantes son una asociación de descendientes de víctimas del nazismo, o algo por el estilo, y se han visto ofendidos por algo que ese usuario debe haber hecho (aunque mi compañero aún no tiene muy claro qué debe ser, excepto que por lo visto tenía una foto de Hitler como avatar). En fin, por si acaso, ha decidido cerrar el foro provisionalmente.

Hablando de este tema con él, todos los compañeros hemos coincidido en que estas actitudes son una aberración, porque:

• De acuerdo, es posible que alguien se haya sentido herido por algo, pero en cualquier caso, que se pelee con el agresor, no con el administrador del sitio.
• Aún en el caso de que quiera ponerse en contacto con el administrador, podría hacerlo de otra manera, mediante un privado, un correo, etc., y explicando las cosas de otro modo "Mira, pasa esto, y creemos que no se debería permitir...", etcétera, no dejando por ahí un últimatum en forma de mensaje público y amenazando con denuncias en plazos de dos días.
• Si realmente se han sentido ofendidos por algún contenido, deberían pedir que se retirase el contenido (cosa que por lo que cuenta mi compañero... ¡no han hecho!). En su lugar, exigen que se elimine al usuario. Pero claro, como muy bien dice el administrador, "¿de qué sirve eso si a fin de cuentas podría registrarse con otro nick y dirección de correo? Si se dedicase a putear a conciencia ¿debería ser yo quien pagase los platos rotos?"

La desafortunada LSSI, desgraciadamente, obliga a tomar unas medidas que, en la práctica son imposibles. Por ejemplo, como muy bien comentan en el enlace de Kriptópolis, los administradores deberíamos hacer públicos todos nuestros datos. Eso es una aberración. ¿Yo tengo que hacer públicos mis datos de contacto sólo por tener un blog? La propia ley en cierto modo se contradice, al desproteger de esta manera una información personal, sólo para facilitar la persecución policial.

El caso de alasbarricadas es un ejemplo más sonado de lo mismo. Quien tiene poder para demandar, lo hace tranquilamente y puede llevarse por delante a gente que no tiene ninguna culpa, lo cual abre la posibilidad de sabotajes sin límite (si queremos putear a un foro o un blog, sólo tenemos que ir dejando mensajes injuriosos contra Ramoncín, por lo visto). Claramente, la ley debe cambiar, pero sólo los legisladores pueden cambiarla, y los escogemos nosotros. Convendrá recordarlo dentro de unos meses.

Foto: www.ningo.com.ar