miércoles, 19 de diciembre de 2007

La filosofía de sillón

Hoy he estado paseando, como casi siempre hago por las mañanas, por algunos de los blogs y webs que tengo enlazadas, y me he quedado con una impresión algo negativa de lo que he visto. No es que no haya novedades o que no se tenga ingenio para contarlas, pero... no sé, veo una tendencia general a opinar de temas serios con una cierta ligereza, al desprecio fácil, a lanzar afirmaciones algo fuertes con demasiada tranquilidad, con un convencimiento pasmoso de que por supuesto que las cosas son así, y a ver quién se atreve a decirme que no.

Escribir en un blog es, como ocurre con quienes escriben una columna en un periódico, una actividad que incita a convertirse en el clásico filósofo de sillón, que desde su cómodo despacho opina alegremente sobre los más variados temas, desde la guerra de Irak hasta la devaluación del dólar, sin cortarse ni un pelo cuando lanza las más audaces opiniones al respecto. Tarea nuestra (me incluyo, puesto que yo también escribo) es la de luchar contra esta tendencia, tan natural por otra parte en el ser humano, y mantener un cierto grado de humildad, de modestia, yo incluso diría que de buen humor. No somos dioses que desde el Olimpo contemplan el mundo, allá abajo, con sus pequeñeces tan sencillas de entender para nuestra infinita sabiduría. Esto hay que tenerlo claro. Somos más bien como esos todólogos, esos sabelotodo de las tertulias televisivas que se dedican a arreglar el mundo ante las cámaras, pero que muy probablemente no sean capaces, en la práctica, ni de arreglar los problemas en su comunidad de vecinos.

Que conste que no discuto el derecho de cada cual a opinar sobre aquellos temas que le llamen la atención. La existencia de este blog es una pruebla de que no dudo de él, e incluso lo ejerzo. Ahora bien, ese tono altisonante y despectivo que a veces leo en algunos bloggers (que no por ello dejan de ser personas inteligentes e ingeniosas), me resulta algo repulsivo, sobre todo cuando se transforma en costumbre, y parecen unos viejos cascarrabias que cada cierto tiempo vuelcan su bilis en la página HTML correspondiente. Convendría, creo yo, que de vez en cuando bajasen de su atalaya y se relajasen. Sí, ya sabemos que hay muchas cosas odiosas en este mundo, que hay mucha gente a la que nos gustaría criticar o poner a parir día sí y día también, pero vale la pena también que lo que escribimos contenga algo de alegría, de buen humor y de actitud positiva y creativa, porque quien aparenta ser un cascarrabias, acabará siéndolo realmente, si es que no lo es ya.

Imagen: http://www.regalosvip.com.ar

6 comentarios:

Isabel Burriel dijo...

No sé si yo caigo en ese error tan común. Pero sé que tienes razón. Tendemos a filosofar sobre lo divino y sobre lo humano pero lo malo a mi parecer no es eso sino, más bien, el dar opinión sin tener ni idea del tema.
Repito, no sé si será mi caso ya que yo suelo escribir alegremente sobre cualquier tema pero si filosofo es porque me pregunto mucho.

Pero no soy ninguna cascarrabiaaaaaaaaas, eh? jajaajaa

Me ha encantado este toque de atención.
Besos

Sonia dijo...

Intentare no darme por aludida (espero no equivocarme...) pero si que es cierto que muchos bloggers tienden a creerse seres superiores sabelotodo que opinan de mil y un tema sin saber de ninguno.

Pero hombre, España es asi y por mucho que nos pongn cables y pantallitas asin semos y asin seremos. Typical Spanish que se dice, no?

Besos

monsieur le six dijo...

Tranquis, no iba por ninguna de las dos. Es una tendencia general que va incluso más allá de la blogosfera, y que afecta normalmente a bloggers más bien "conocidos", aunque todos, quizás hasta yo mismo caigamos a veces en ese vicio. Por eso precisamente de vez en cuando intento plantearme estas cosas, para corregirlo.

Johnny Tastavins dijo...

Bueno, ¿sabes? parece que lees mi pensamiento. El blog ha sido un ejercicio interesante pero repasando entradas de hace meses descubro que no voy adelante, más bien al revés. Que efectivamente muchas veces las crítica fácil es la que guía el contenido. Muy posiblemente en breve cierre el chiringuito para desarrollar mis inquietudes en otras áreas. Fue bonito mientras duró.

monsieur le six dijo...

Como veas, pero no creo que sea cuestión de cerrar el chiringuito, sino de saber contenerse un poco ante la tentación de hacer de juez infalible. Creo que la moderación es una virtud que está al alcance de todos.

clockwork_doll dijo...

Llegué aquí por la misma instancia que citaste en un comienzo, paseando por blogs vecinos...que interesante, lo más probables es que la mayoría piense que todo dueño de un blog es un disque "sabelotodo", hablando o mejor dicho escribiendo con palabras sacadas de un diccionario en desuso...también es cierto que als er uno administrador y dueño de un blog, te permite, en teoría escribir lo que se te antoje siendo esto falto o no de certeza, realidad, inteligencia, etc...peor si, uno siempre espera leer algo de acuerdo a la categoría de cada uno...interesante blog el tuyo.
Ni idea de donde eres.

Saludos.