lunes, 7 de enero de 2008

The Rocky Horror Picture Show

Existen dos tipos de película: The Rocky Horror Picture Show y todas las demás. Probablemente sea la obra a la que mejor se puede aplicar aquello de "te gustará o no, pero no te dejará indiferente". No soy nada aficionado a los musicales (me pone de los nervios cuando en medio de una escena va uno de los personajes y se pone a canturrear), pero es que esta película es de otra dimensión. No en vano es una de las películas de la Historia del Cine que más veces se ha proyectado: desde que se comenzó a hacer famosa a finales de los 70 hasta la actualidad, prácticamente se puede afirmar que nunca ha dejado de haber, semana tras semana, en una u otra sala del mundo, alguna sesión de la película.

El argumento trata de una pareja de jóvenes bien educados (y vírgenes aún) que acuden a un castillo a pedir ayuda, porque se les ha pinchado una rueda del coche en medio de la tormenta. A partir de ahí, todo son extraños sucesos en un lugar habitado por un travesti con vocación de Frankenstein y sus atípicos sirvientes e invitados. La obra (originalmente teatral, pero adaptada al cine en 1975) es una extraña combinación de película de terror y musical de Broadway en plan rockero, con un mensaje además muy interesante (es disparatada pero eso no quiere decir que no tenga sentido).

Haría falta escribir mucho para resaltar todos los aciertos y detalles interesantes de la película: desde el mismo comienzo con las escenas de la boda de los amigos de Brad, hasta el narrador con aspecto de detective británico, que incluso baila como los invitados al sonar "Time Warp" (momento estelar de la película, y brutal el detalle de que saque un mural para mostrarnos cómo se baila) pasando por la aparición de Meat Loaf con su Harley interpretando a Eddie, o las infidelidades entre Brad y Janet, con conversaciones calcadas (buenísimo cuando por ejemplo Janet le pregunta a Frank "¿Qué has hecho con Brad?" y éste le responde "Nada. ¿Por qué? ¿Crees que debería?"), o el numerito (tan a lo Olivia Newton John en Grease) que hace Janet cuando seduce a Rocky. Por cierto, que Janet está interpretada magistralmente por Susan Sarandon, en uno de sus primeros éxitos como actriz.

Casi todas las escenas son buenísimas y hay muy pocos momentos flojos. Las actitudes de los personajes (y por tanto también la interpretación de los actores) son muy acertadas y en general los números musicales encajan a la perfección; y eso que no es nada fácil encontrar una música y unas letras que no rompan la acción de una película. En definitiva, una obra maestra. Hoy en día puede resultar asombroso que con tan pocos medios se pueda hacer algo tan genial: Una muestra más de la diferente mentalidad con que se hacían las cosas en 1975, cuando aún no se consideraba imprescindible llenarlo todo de efectos especiales o que el/la protagonista fuese el/la sex-symbol de moda para que la película triunfase. No creo que el presupuesto fuese muy alto, más o menos como la mayoría de las películas de serie B; de hecho hay efectos algo cutres como el rayo de antimateria, o las vestimentas de los personajes en algunos momentos, pero no desentonan, porque en una película tan disparatada como esta, incluso queda bien hacer las cosas así; más aún cuando en realidad se trata de una adaptación de una obra de teatro, en la que evidentemente los escenarios no pretenden un realismo total.

A lo largo de tantos años, se ha generado una cierta "cultura" un tanto friki alrededor de las proyecciones, ya que se acostumbra a realizarlas con actores que interpretan la obra allí mismo, al mismo tiempo que se proyecta, e incluso el público participa de diversas maneras. Gracias a esto, se ha mantenido en cartel durante tantos años, y se realizan proyecciones de la película constantemente en muchos lugares. En España, sin ir más lejos, hay un club de fans y todo, con una página dedicada a la película, etc. Por increíble que parezca, se representa habitualmente: Hace tan sólo un par de días hubo una sesión en Barcelona, por ejemplo, y en Madrid también hay sesión habitual. Y eso que a fin de cuentas este tipo de obras encajan más con la mentalidad anglosajona, pero la naturaleza de esta película hace que traspase fronteras.

Se podrían explicar muchas cosas más sobre la película, pero quien tenga curiosidad puede encontrar abundante información sobre ella. En definitiva, que quienes no la hayan visto tienen que verla. Vale la pena.

Imagen: http://www.bloj.net/towsend/cgi-bin/archives/2006/11/the_rocky_horror_picture_show.html

3 comentarios:

Sonia dijo...

Huy, pues no la he visto, pero tal y como la pones habra que hacer alguna sesion de sabado con mantita, palomitas y agüita!!!

Anónimo dijo...

Tooouch'a tooouch'a touuuuch'a touch meeeee!! I wanna feel dirtyyyy!!

Si, me encanta esta peli, siempre fueron mi debilidad los dulces travestis de la Transilvania travesti ^_^

Johnny Tastavins dijo...

Efectivamente una Susan Sarandon jovencísima protagonizó esta peli de culto. Hace muuuuchos años que no la veo y me has picado la curiosidad y la nostalgia. Miraremos de bajarla de la mula para verla de nuevo, esta vez en casa :-)